Aprendiendo de Otros

Los puertorriqueños tienen que aprender de las luchas de otros.

Décadas atrás, cuando en los estados del Sur se les negaba irresponsablemente a los ciudadanos negros la igualdad de derechos, éstos no se dieron por vencidos. Ellos insistieron en su lucha pacífica, y lograron deslegitimizar el sistema segregacionista al punto de que se hizo social y políticamente insostenible para el gobierno mantenerlo. Gracias a su lucha consistente y firme, la segregación colapsó, y los negros lograron obtener la igualdad de derechos que la Constitución les garantiza.

El Estado Libre Asociado, ese embeleco injusto y criminal que mantiene a Puerto Rico sumido en el subdesarrollo y el tercermundismo colonial, no es otra cosa sino una forma moderna de Apartheid, de segregación étnica, que sobrevive mediante subterfugios y pretextos, para proteger los intereses económicos de unos pocos a expensas de los derechos y la prosperidad de la inmensa mayoría.

Es necesario deslegimizar el coloniaje en las esferas de poder politico, y en los medios de telecomunicación masiva de los 50 estados. Hay que insistir, fastidiar, jeringar, hasta que la existencia de ese sistema segregacionista, discriminador y criminal llamado “ELA” se convierta en un liability. Hay que deslegitimizar completamente el coloniaje, delatarlo como el grotesco engendro racista que es, hasta el punto en que nadie en el Congreso, ni en el poder Ejecutivo , ni en las multinacionales se atreva a apoyarlo nunca más.

Para eso es que se supone que en Puerto Rico existe un partido “estadista”. El PNP no debe esperar a que el status de Puerto Rico se convierta en un asunto de importancia para el Congreso; la responsabilidad de un partido estadista es HACER que el status de Puerto Rico se convierta en un asunto de importancia. La organización y ejecución de éste tipo de campaña de medios masiva para retratar al ELA como lo que realmente es debería ser trabajo de Luis Fortuño, Pedro Pierluisi, Kenneth McClintock, Thomas Rivera Schatz, Jennifer González, y el resto del liderato del PNP. El PNP debería pedir tiempo en cuanto programa de discusión política existe en las cadenas nacionales de television, marroneando el punto ad nauseaum ante cada pundit de la derecha y la izquierda.

Ganar un plebiscito no es la meta, es apenas el principio. Tal vez no se obtenga la estadidad aunque ésta gane un plebiscito de status con 49%, o aún con 52%. Pero una victoria plebiscitaria, con los números que sean, levantará el issue de una forma significativa en los medios nacionales. Entonces le tocará a todos esos que mencioné antes irse a chavar , jeringar y mantener el issue vivo hasta que se logre una resolución final.

Es por eso que había que realizar el plebiscito en 2009, y no esperar a tener 3 años de issues y peleas entremezclados con el issue del status.

Pero más vale tarde que nunca. El pueblo estadista debe presionar a su partido estadista para que realizen el plebiscito y para que NO DEJEN MORIR EL ISSUE después del resultado.